En el día de la magia

A sus Majestades (taurinas) los Reyes Magos
6 de enero de 2010
Queridos Reyes Magos que atendéis las peticiones de los aficionados conspicuos que en este mundo singular del planeta de los toros se dan. Deseamos, majestades, que en este año ya cercano –y de futuro tristemente predecible- nuestra desbordante ilusión por este hermoso espectáculo se pueda mantener y alimentar. Que la magia que transportáis a lo largo y ancho del universo mantenga en nuestros corazones las ganas de trabajar honradamente por la defensa e integridad de esta Fiesta única; que nos conserve la perseverancia en la verdad que la fundamenta; que nos siga enamorando su hermosura; que su misterio perdure; que nos refresque su arte; que no nos destruya su carnalidad; que nos alerte de la especulación; que la exigencia de un espectáculo auténtico no se acobarde; y que la fuerza, la intuición y la belleza continúen desarrollándose en nuestra alma torera.
Majestades, pedimos temple para disfrutarla y salud para vivirla.
Atentamente, una aficionada